Como dueles Junior

¿Cómo plasmar en una página la horrorosa eliminación de Junior ante Tucumán? Tal vez para resumir lo ocurrido lo más cercano puede ser equipo “sin alma”, trillada frase que se aplica a la perfección a la situación.  No existe otra explicación para lo que pasó, un grupo de jugadores que tenían todo por ganar, por alcanzar, pero sin embargo dejaron claro con su pasividad y displicencia que no tenían ningún tipo de interés en jugar el torneo más importante del continente Americano, tal como leí y escuche anoche, la cabeza la tenían en su regreso al carnaval de Barranquilla.  Sinceramente no me extrañaría para nada que en estos cuatro días de festividades las figuritas del equipo sean vistas en carrozas, fiestas y parrandas... Porque sí, en Junior todo es así, folclor, risas, escándalos y salarios altos con poco futbol.

Si empiezo a evaluar uno a uno a los que fueron obligados a jugar en Argentina ninguno supera un uno en calificación, es más, TODOS tienen cero. Desde Viera hasta Ovelar pasando por Gamero, todos mostraron un infra nivel hasta sospechoso.  Viera goles entre las piernas, además sin imprimir actitud al equipo, ni siquiera reclama a la terrible dupla de defensores después de los goles, función de arquero y de capitán. Balanta, ni para que desgastarme, NO TIENE NIVEL PARA UN TORNEO INTERNACIONAL, lo ha demostrado hasta el cansancio, su nivel esta por debajo de un jugador aficionado hace varios partidos y sin embargo Gamero se casó con él sin importar que ha sido el causal de goles específicos y ayer lo demostró en todo el partido.  Alexis ratifica que en la Liga es una fiera, pero en torneos internacionales un cordero, la pasividad de él y Quiñonez en el tercer gol me hacen pensar cosas impensables. Quiñonez, exactamente igual, errático, torpe, nulo en marca y perdido por completo en ataque… pero ese fue el gran refuerzo 2017 para la banda igual que Ochoa, igual de ausente y pecho frio que los demás.

En el área de supuesta recuperación, James y Pico sin ambición, sin compromiso, no ganaron, es mas no buscaron un solo rebote y con manos en la cintura miraban a lo lejos en cada gol del rival. Estrada aislado y sin creación no puso un solo pase que por lo menos asustara o preocupara a los rivales.  Jamás se encontró con Aponzá que supe que jugó por la planilla y no por haber tocado el balón en los 90 minutos. Ovelar, un fantasma, lejos de lo que era sigue siendo sostenido en la titular por el técnico, desperdiciando los buenos momentos de Cuesta y Rangel. 

Los cambios Toloza, Cuesta y Hernández se contagiaron de la dejadez, abonándole a Sebastián el gol de la “honrilla” que afortunadamente no fue suficiente, ¿o es que queríamos pasar a pasar más pena y burla con Palmeiras y Peñarol? Lastimosamente clasificamos a Sudamericana, no siendo suficiente una burla internacional por año, en este 2017 tendremos dos….

Del cuerpo técnico… no se Ernesto, no se… ¿Qué argumento sólido hay para sostener a Gamero? Particularmente no soy de cortar procesos tan rápido, es más sé que va a continuar al frente del equipo, pero en Liga últimos sin puntos y ayer hizo todo, absolutamente todo, para sacarse solito: sostener a Balanta es un error completo suyo, mucho hablo en rueda de prensa de no casarse con jugadores, pero ahí está en un matrimonio largo.  ¿Los cambios? Si en el 1T Junior no tuvo una sola llegada al arco rival, ¿Por qué saca a Estrada para meter a Toloza? ¿No fue el mismo Gamero quien declaró que ante Tucumán no jugaría por arriba porque sus centrales median metro y pico? ¿Entonces? Incoherente en sus declaraciones y en sus acciones. ¿Quién es el encargado de imprimirle actitud a un equipo sino el técnico? ¿Dónde estuvo la mano del técnico en el medio tiempo? La actitud de Junior en el 2T fue igual o peor que en el primero, parece que en el entretiempo los hubieran felicitado y no regañado (por ser cortes y bien hablada).

El panorama no puede ser más negro, pensé que habíamos tocado fondo con las declaraciones de Fuad y la dirección técnica de Giovanni, pero está claro que en Junior la desgracia nos persigue día a día y semestre a semestre. Somos el hazmerreír nacional e internacional, es hora de bajarnos de esa nube de equipo grande y aterrizar a la realidad: eliminados siempre por equipos chicos o en formación en torneos internacionales, aquí les refresco la memoria:

 

 No hay más por decir solo que dueles Junior, dueles y mucho, extraño montones al mágico y grande equipo con actitud y h…os del 93, ese que nos dio la mejor presentación internacional en el 94, ese que no se arrugaba ante el rival y que aunque perdió dejo el alma y la sangre en la cancha, ese que hoy debe sentir lo mismo que yo VERGÜENZA Y PENA del equipo. ¿Qué te hicieron Junior? ¿Ya estás muerto o en algún momento cuando te liberen volverás?


Junior en Carnaval

Una comparsa desordenada y descoordinada fue lo que vimos el Domingo en el estadio Jaime Morón de Cartagena.  Junior en su tercera presentación en la Liga Águila sumó su tercera derrota consecutiva, ubicándose en el último lugar de la tabla de posiciones con cero puntos cosechados.  Los goles del rival fueron anotados por Cesar Arias y Juan Diaz mientras que el empate parcial de los rojiblancos fue anotado por Edinson Toloza.

El partido ante Alianza Petrolera  fue deprimente, iniciando desde la titular escogida por el técnico Gamero hasta lo hecho en cancha por los jugadores.  Sigo sin entender porque tan solo a poco más de 3 días de declarar que no jugaría con dos delanteros el técnico destruye todas sus palabras y alinea a dos nueves puros de área, pero los manda a la guerra desahuciados. Sí, desahuciados, o entonces ¿Cuál era el objetivo de plantar dos jugadores de área netos sin nadie atrás que respalde o que genere alguna oportunidad de gol? ¿Por qué el sacrificio innecesario de Michael Rangel y Bernando Cuesta sin un solo 10 o falso 10 atrás que les surta de oportunidades?

Más increíble aun que en la rueda de prensa el técnico declare “Jugar con dos delanteros se me hace complicado…. Hoy los volví a ver a enredados…no había elaboración de juego cuando teníamos el balón.”  Y ¿Qué era entonces lo que esperaba al alinear a Toloza por una banda, Aguirre por la otra y dos nueves apretados en el área? ¿Cuál era su esquema “generador de juego”? Claro que las cosas cambiaron con el ingreso de Jarlam, si bien viene de un largo periodo de inactividad su ADN es generar juego en el medio y con su presencia en cancha Junior mostró un poquito de intención ofensiva.

Sinceramente si a la derrota de ayer se le debe colocar algún responsable el primero es Alberto Gamero, así como destaque su coherencia en los argumentos expresados en partidos anteriores, hay que reconocer que lo del Domingo careció de la misma. 

En segunda instancia es necesario un “hasta aquí” para algunos jugadores del plantel, ¿Quién puede explicar la displicencia, falta de ritmo, falta de técnica y hasta falta de sentido común de Félix Noguera? ¿Es acaso un nuevo activo pasivo en Junior? Inexplicable su desempeño en cancha y la cantidad de minutos que le otorgo el cuerpo técnico.

De Toloza ni hablaré, irreal que algunos “cobren por ventanilla” el gol que anotó ayer, ¿será que se les olvidó que le pagan por eso? ¿Qué su obligación y trabajo es anotar goles? En fin, es un tema que no se agotará jamás.

Lo rescatable de la negra tarde de Junior fue el juego serio y ordenado de Enrique Serge, la inclusión del Pecoso Correa y el regreso de Jarlam.  Todo lo demás para el olvido y para tomar correctivos.

Lo cierto es que hasta hoy, jugada la cuarta fecha de la Liga Águila, Junior es un carnaval que no suma un solo punto y se hunde cada vez más en el fondo de la tabla…. ¿Alcanzará una victoria ante Tucumán para sopesar el tsunami de malos resultados en el torneo local? En caso de avanzar en la Libertadores ¿Qué piensa hacer Gamero para afrontar Libertadores, Liga y Copa? Complicada situación…. Esperemos haya un buen desenlace a corto, muy corto plazo.  

Apretada victoria

Complicado partido jugó Junior en la ciudad de Cartagena, era sabido que la sinfonía que se vio ante Carabobo pasaba también por las bajas exigencias del rival.  Sin embargo el objetivo principal que era ganar e ir con la ventaja a Argentina se logró. Que es una distancia muy corta sí, pero tampoco podemos asegurar que fue un mal resultado.

Del funcionamiento del equipo hay muchas cosas por depurar. Claramente el equipo que tuvo la posesión del balón durante el 85-90% del partido fue el cuadro rojiblanco, pero esto no quiere decir que haya sido dominador e incisivo. Lejos de esto, se vio errático y corto de ideas con el esférico. 

La estrategia de Gamero sigue siendo apostar por un 4-2-3-1, siendo ese uno solitario Ovelar. Nuevamente reitero mi pensamiento, Roberto es un excelente jugador técnico y jamás lo pondré en duda, pero es evidente que no se está aprovechando todo su potencial.  En la noche del Jueves se vio muy retrasado, saliendo constantemente del área para buscar el balón y  por ende nunca estaba en posición clara de gol.  Lo anterior se debe también a que la producción detrás de el jamás estuvo, Sebastián Hernández nuevamente ratifica que esta pidiendo la banca a gritos.  Camino la cancha durante todo el tiempo que estuvo dentro de ella, es más terminado el primer tiempo no le contabilice un solo pase hacia adelante en el terreno de juego… y se supone que es el encargado de la creación.  Es increíble como Estrada se quiere comer la cancha con movilidades individuales de lado a lado, pero no encuentra el engranaje en el medio del campo. 

Por la otra banda pasa igual, Aponzá con mas gambeta y encare intenta sobrepasar las líneas rivales, pero Tucumán sumó muchos hombres en defensa y nunca encontró, mientas estuvo Hernández en cancha, un socio que rompiera las líneas con paredes y toques rápidos.

La cuestión cambió radicalmente con el ingreso de Aguirre y Cuesta, el primero le dio la movilidad que no tenia el equipo y además fue el apoyo y el anclaje para devolver jugadas cortas con Estrada, así como también fue clave en la apertura de la cancha por los costados.  Justamente en una linda jugada en la que participaron Estrada, Aguirre y Cuesta llegó el centro que remataria Aponzá para el gol de la victoria.

En mi opinión Gamero tiene dos opciones en el frente de ataque:

1.     Mantener el 3-1, pero ahí tiene que rotar a Hernández por Aguirre y dejar a Estrada por el medio y así mismo rotar a Ovelar por Cuesta que le da mas diagonales y se queda como centro delantero de área.

2.     Cambiar la figura y jugar 2-2 ó 3-1 siendo la línea de tres Ovelar, Estrada y Aponzá y el punta Cuesta o Rangel.

Jugando a ser Gamero en Argentina, con un Tucumán que saldrá a buscar la victoria, me iría por la primera opción que me brinda mayor aporte en marca sin balón y mayor rapidez en el ataque.

Cambiando de frente de ataque a defensa, resaltar que Balanta a pesar que inició dubitativo y lento fue mejorando con el pasar de los minutos, tuvo varios cierres importantes que nos salvaron en la ultima línea;  por su parte Alexis como siempre serio, seguro y empujando al equipo desde el fondo. 

En el medio recuperador, Pico claro y doblándose en esfuerzo ya que Sánchez tuvo uno de los peores partidos que se le ha visto con la rojiblanca, errático en los pases en salida dejó mal parado en varias ocasiones al equipo hasta el punto que esto obligó a su sustitución por Roa en la segunda mitad.

En líneas generales fue un partido duro y complicado como se preveía ante un rival ordenado que presiona alto y no te deja avanzar con el balón.  Lo que se viene en Argentina es bravo, ya demostraron en la llave anterior que alma y ganas de avanzar tienen y de sobra.  Junior tiene que aprovechar la mínima ventaja que tiene en el marcador y jugar un partido inteligente, eso sí, aprovechar las oportunidades que tenga con una alta eficacia…un gol de visitante nos daría la tranquilidad necesaria para avanzar de fase.

En manos de Gamero esta la estrategia y la táctica que quiera y crea mas conveniente usar en tierras gauchas, así como también decidir quienes serán los encargados de llevar a la practica la idea de juego que escoja.

Vamos junior carajo, cada vez mas cerca!

Una serie de eventos desafortunados

Desazón es el sentimiento generalizado después de la abultada, pero inmerecida derrota tres por uno ante el América de Cali.  Complicado plasmar en unas líneas el buen juego de Junior porque no está acompañado por un resultado que así lo soporte.

Para los que solo leen o ven los resultados de los partidos la consigna será: “Reviviendo un muerto o volvemos a lo mismo”, pero para los que analizamos el cómo se llegó a ese resultado hay una serie de análisis que en el fondo nos dejan algo tranquilos.

Hablando con hechos Junior fue mucho mas que América durante la mayoría del partido, es más hasta el minuto 34 fue ampliamente superior. Manejó los tiempos del partido e incluso estuvo arriba en el marcador con el gol anotado de cabeza por Alexis Pérez a los dieciocho minutos después de un centro de Estrada. Fue un equipo compacto que ejerció presión alta con las líneas adelantadas y que nuevamente jugó a buscar el arco rival.  La consigna de Gamero sigue siendo muy clara, este Junior no se va a esconder en ninguna plaza y por el contrario intenta proponer con balón al piso un futbol vistoso y agradable.

Todo iba perfecto y acorde a los planes hasta que Balanta inició una noche personal de terror, para iniciar comete un claro primer e infantil penal sobre el Tecla Farias que sirvió para que Martínez Borja anotara el primero de su triplete de la noche. Tan solo un par de minutos después Balanta nuevamente se equivoca y suelta la marca dentro del arco dejando libre a Martínez Borja para que anotara el segundo en su cuenta personal.

Con el resultado en contra terminaría el primer tiempo, sin embargo lejos de cualquier recriminación, en el segundo tiempo Junior salta al campo de juego en busca de el empate parcial.  Aponzá tuvo en sus pies tres oportunidades clarísimas de gol que no supo concretar desperdiciando así la posibilidad, no solo de igualar, sino de remontar el marcador. 

Para terminar con una serie de eventos desafortunados Balanta nuevamente comete otro claro e innecesario penal que le costó la roja y además la tripleta de Martínez Borja.

Obviamente el resultado es abultado y claro, pero al mismo tiempo se puede decir que es mentiroso. Junior fue quien manejó el balón y quien creó oportunidades para obtener un resultado favorable, lastimosamente Aponzá se contagió de la ya conocida falta de definición que ronda por el equipo y esta vez los goles se necesitaba, ya que no eran para una goleada sino para una remontada que no se dio. 

A Gamero solo le criticaría el seguir insistiendo con Toloza como primera opción de cambio, mas aun teniendo en la misma banca a jugadores como Rangel y Cuesta.  Día a día me pregunto que es lo que hace Toloza en los entrenamientos que lo hacen merecedor de semejante premio… porque durante los partidos no hace ningún merecimiento, el Sábado paseo la cancha como correcaminos sin pena ni gloria. 

En conclusión puedo decir que Junior NO JUGÓ MAL, esta vez podemos usar el conocido cliché “nos falto suerte”, se juntó una noche para el olvido de Deiby Balanta con una de desperdicio de Aponzá.  Si Correa estaba esperando una oportunidad para retomar su puesto de titular, se la sirvieron en bandeja de plata, no queriendo decir con esto que hay que desechar a Balanta, pero la banca se la ganó mucho mas allá de la forzada por la expulsión.

Otro que sigue mas intermitente que la luz de electricaribe es Sebastián Hernández, en Cali estuvo lejos y distante del 10 que jugó ante Carabobo.  Es increíble como Estrada con muchísimo menos tiempo de estar en el equipo se ha acoplado de mejor manera y se ha convertido en el socio de todos en el terreno de juego.  Hernández tiene que despertar, el semestre no está para esperarlo nuevamente y eso es algo que debe exigir el técnico.

Este equipo me sigue gustando, el estilo de Gamero es claro y definido, hay herramientas individuales importantes para engranar un conjunto completo y competitivo. 

Así como con el triunfo ante Carabobo no se tenia que sacar el carro de bomberos, ahora tampoco hay que colocar la lapida al proceso. Con trabajo – y de eso sabe el técnico – y organización Junior promete una buena campaña, eso si, no hay que quedarse dormidos sino atacar las falencias puntuales que nos costaron este duro e inmerecido resultado.

Junior Bakano

Excelente demostración de futbol nos regaló ayer Junior de Barranquilla en Cartagena en su contundente triunfo tres por cero ante Carabobo Fc.  Si bien es cierto que el rival de turno no le opuso resistencia, no hay que desmeritar ni un segundo el fútbol alegre y llamativo que desplegaron los rojiblancos. 

Durante los primeros minutos Carabobo intentó replegar en su propia cancha a los locales ejerciendo una presión alta continuada, sin embargo fue cuestión de 8-10 minutos para que Junior se plantara con comodidad en el terreno de juego y deslumbrara con juego vistoso que incluía variantes de todo tipo: cambios de frente precisos, salidas con sus laterales por las bandas, pases a un toque entre los creadores, relevos completos, juego aéreo eficaz… en conclusión un Junior bakano, que juega con el balón pegado al piso y juntando individualidades en sociedades de forma productiva.

Difícil escoger una sola figura del partido de anoche, por un lado la defensa y el arquero nuevamente sacaron el arco en cero, dejándolo limpio en esta primera serie.  Regresó el Alexis Pérez de siempre, seguro, rendidor y responsable en el fondo acompañado de otro cerrojo, Deiby Balanta. Juntos estuvieron certeros atrás dejando casi sin posibilidad a cualquier atacante Venezolano.  

A los centrales hay que sumarle el apoyo de los laterales, tal como lo mencioné previamente, entre sus posiciones se hicieron relevos completos que taparon cualquier hueco en marca durante el desarrollo del partido.  Por fin volvemos a ver salidas por los costados en el equipo, hace pocos meses no podíamos ni soñar con proyecciones por las bandas, mucho menos con centros efectivos.  Ochoa y Quiñonez mejoraron radicalmente su presentación y le aportaron no solo marca al equipo sino oportunidades de ataque por sus bandas, abriendo la cancha al máximo y regularmente con cambios de frente que tenían enloquecidos a los rivales.

Para seguir en orden, la pareja de recuperadores brillante, silenciosos pero aplicados, James Sánchez como en sus mejores momentos, oportuno e inteligente con el balón, fue el apoyo que se pedía a gritos para los creadores;  por su parte Pico ordenado y aplicado se comió el medio campo… me gustaría tener la estadística de balones entregados correctamente por este par de jugadores durante los noventa minutos.

Llegamos a la línea de la magia, por fin se juntaron los que saben, Hernández, Estrada y Aponzá manejaron los hilos del partido a su antojo.  Abrieron espacios, rompieron la defensa una y otra vez con paredes a un toque entre líneas, se mantuvieron activos durante todo el juego buscando y pidiendo el balón para jugadas rápidas y precisas. Va poco tiempo y ya saben dónde se ubica cada uno en las jugadas, lo que les permite jugar rápido y al espacio… me ilusiona pensar lo que pueden seguir mejorando cuando con el tiempo memoricen y automaticen mucho más cada uno de sus movimientos.  Los tres se complementan fácilmente: Hernández da la pausa, Estrada la movilidad y Aponzá la gambeta y el encare.

Para cerrar la estrategia Gamero, la punta la tiene Ovelar.  Gratificante que se haya reencontrado con el gol, y más aun de la manera como lo hizo: a la paraguaya, sostenido en el aire clavó el balón en la esquina baja del palo derecho del arquero dejándolo sin ninguna posibilidad.  Claramente después de anotar se le vio mucho más confiado y buscando el arco desde distintas perspectivas, parece que se acabó la pólvora mojada y ahora vienen los juegos pirotécnicos propios de él.

Durante los noventa minutos Gamero movió la banca en tres oportunidades: Toloza por Hernández, Rangel por Ovelar y Correa por Ochoa.   Con el ingreso de Toloza se buscaba abrir las bandas  y generar opciones – lo cual se hizo – en tan solo tres minutos Edinson tuvo tres clarísimas oportunidades de gol que infortunadamente no pudo concretar.  A favor diré, que genera espacios y oportunidades fácilmente, pero en contra anotar que no sabe cómo definir;  ¿será que le pueden sacar de la cabeza que es delantero y ubicarlo como volante o lateral? Por su parte Rangel aprovechó la primera que tuvo y convirtió el tercer gol que firmaba la goleada de la noche.  Mientras que el último cambio fue obligado por un golpe que recibió Ochoa, dejando a Correa en una línea de tres al lado de Pérez y Balanta.

Me gustó mucho este equipo, así es que nos gusta el juego en Barranquilla y Gamero lo sabe, con el despliegue futbolístico mostrado demuestra que hay nomina para competir con decoro en los torneos que se están enfrentando y que los refuerzos traídos están respondiendo a las expectativas.  Me agrada ver que, a pesar de ir ganando ampliamente en el resultado, Gamero siempre estuvo parado en la línea dando indicaciones y nunca se vio un movimiento de “cuidar el marcador” siempre sus indicaciones y sus movimientos tácticos fueron ofensivos.  

Es cierto que Carabobo fue, con el respeto que merecen, un rival liviano, se viene en Copa un debutante que juega con el alma: Atlético Tucumán; y en Liga un dolido y necesitado América. Bonita oportunidad para demostrar que el juego de Junior no depende del rival sino de sus capacidades propias. Este es el Junior lindo, este es el Junior bakano!

Debut y triunfo


Con pie derecho inició Junior su semestre, mejor aún su presentación en el torneo internacional más importante del continente.  Un soberbio y espectacular remate de Aponzá al minuto 31 de juego le bastó al cuadro tiburón para traerse la victoria y ventaja para Colombia.

Si bien es cierto que el juego ante Carabobo no fue vistoso ni de exportación, tan bien hay que tener en cuenta que Junior en estos momentos está en proceso de formación.  No se debe olvidar el hecho que tan solo en la titular Gamero alineó cinco jugadores oficialmente debutantes: Ochoa, Quiñonez, Pico, Aponzá y Estrada.  A lo anterior sumarle que dos de los tres cambios realizados también eran nuevas caras: Carrascal y Ávila.   En total anoche pudimos ver siete jugadores nuevos con la camiseta rojiblanca y además conocer mejor la visión y el estilo que Gamero, también debutante oficial, le quiere imprimir al equipo.

Dejando un poco de lado todo el tema de nuevos jugadores y adentrándonos en el funcionamiento del equipo me gustó la propuesta del técnico, claramente no es de los que se casa con una sola figura táctica durante los noventa minutos y por el contrario va modificando su estrategia acorde con las exigencias del partido. Con la titular plantó un claro 4-2-3-1 pero fue variando el dibujo durante los noventa minutos a 4-2-2-2 e incluso con el ingreso de Toloza marcó una línea de tres para taponar la salida rival.   Sus cambios nunca enmascararon un deseo de “guardar el marcador” dejando claro que su intención es jugar bien a la pelota y buscar el arco rival.

Claramente ayer el jugar bien a la pelota se vio ensuciado por una terrible cancha que no permitía desplegar ningún tipo de fútbol de altura, me impresiona que permitan jugar un torneo internacional en una cancha con esas condiciones.  Si bien la condición fue para los dos equipos por igual, Junior se vio más afectado al no estar acostumbrado a esta superficie y más aún, en el  estado en el que se encontraba.  De los jugadores, el que más sufrió el cambio de superficie, fue Alexis Pérez, quien se vio incomodo durante todo el partido, incluso se resbaló en varias oportunidades y en consecuencia la zaga defensiva del equipo no estuvo ordenada.

Los laterales siguen estando en deuda, pero confío en que su trabajo será mejor a medida que se engrane el equipo.  Entre los dos tuvo un mejor desempeño Ochoa que Quiñonez, éste último tuvo varios errores personales en rechazos, marcas y entregas de balones en la salida que dejaron mal parado y en situación de desventaja al equipo.  Afortunadamente Viera no perdió la costumbre de ser figura y por el contrario mejoró notablemente sus atajadas dando menos rebotes.

Hernández debe buscar y pedir más el balón, adueñarse de su rol de “10” y tomar las riendas del equipo, buscar sociedades que abran caminos de ataque y generar pases ofensivos y no devolver tanto la pelota (recuerdo las palabras del Pibe en su entrevista, el 10 genera pases hacia adelante, no le devuelve el balón al seis o al ocho). 

Me preocupa que Sánchez se ha convertido en jugador de cristal, se ha vuelto costumbre tenerlo lesionado, lo cual desvaloriza al jugador y además vuelve imposible el generar una continuidad o un trabajo táctico completo para el equipo. Tema para revisar con los preparadores físicos y con el jugador. 

Sigo pensando que el hombre de punta no debe ser Roberto Ovelar, igual que en los partidos anteriores ayer jugó de espaldas al arco y aguantando el balón… esperaré a ver si Gamero me hace el milagro de verlo jugando al lado de Rangel y/o Cuesta.

En términos generales no se puede dar un concepto final del funcionamiento del equipo con un solo partido, quedaron explícitas las intenciones de juego del técnico, como también las falencias en defensa, juego aéreo y demás anotaciones por mejorar.  Me gustó su declaración donde coherentemente dijo “claramente hay que mejorar”

Siempre sostendré que es mejor revisar y mejorar cuando se tiene el marcador a favor, más aun cuando se obtuvo un triunfo como visitante en el primer partido del semestre que además fue en la Copa Libertadores.  Le tengo Fe al equipo, cuando es evidente el trabajo se generan expectativas.  Se viene el debut en la Liga Colombiana para después cerrar la primera pre – fase Libertadores en Cartagena ojalá con un avance a la siguiente ronda.

Vamos que vamos Junior!